Personas Mayores y Demencia.

Seminario: Personas Mayores y Demencia.

           Realidad v/s Desafíos

El Centro UC de Envejecimiento y vejez junto, a la Fundación Oportunidad  Mayor, busca desarrollar un trabajo académico interdisciplinario colaborativo y continúo con profesionales de diversas áreas. Apoyando la promoción de la calidad de vida de personas mayores, en aspectos éticos, de salud, psicosociales y económicos.  Su planteamiento es, ser un puente entre el saber y la sociedad para colaborar con uno de los retos más significativos del siglo XXI, el envejecimiento de la población y sus consecuencias.

Chile se encuentra en una etapa avanzada de envejecimiento poblacional. Las proyecciones del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), indican que para el 2025, observaremos un crecimiento  acelerado del grupo de personas mayores de 80 años y con esto las enfermedades.  La problemática crítica son  las  Demencias, entendiendo esto como un síndrome clínico de deterioro objetivo, de carácter crónico y generalmente irreversible. Caracterizado por  la disminución de la capacidad funcional, en las actividades cotidianas de personas mayores, afectando su autonomía. La demencia es una de las principales causas de discapacidad y dependencia entre las personas mayores, tiene un impacto socio-familiar y económico, tanto en los cuidadores, como en la sociedad en general. Siendo el 2013 la quinta causa de muerte en nuestro país.  

Conociendo toda esta información, la inquietud es una, como podemos trabajar en esto, pues bien aquí algunos lineamientos;

•  Promover una nueva mirada de la Demencia y su relación con la vejez.
• Incorporar y considerar a los  usuarios en cada programación sanitaria.
•  Promover la sinergia entre aspectos sociosanitarios y una perspectiva de desarrollo territorial.
• Catastrar las fuentes de cuidado, tanto del usuario como del cuidador.
•  Identificar la densidad de las redes de apoyo.
• Identificar fuerzas y recursos del usuario y el centro de salud.
• Gestionar oportunidades de trabajo colaborativo  en instancias públicas.
• Incorporar a actores comunitarios, para educar sobre las demencias a la comunidad.
• Utilizar el soporte tecnológico como servicio social, disponible para informar a usuarios.
• Fácil acceso a material educativo de acuerdo a las necesidades de la comunidad.
• Fortalecer la sistematización del trabajo realizado para, por y con las personas mayores.
•  Capacitar tanto al personal sanitario, como al personal comunitario.
• Instaurar intervenciones para respiros del cuidador, espacios de liberación.
•  Entregar acompañamiento psicoemocional a usuario, cuidador y/o familia.
• Contar con equipo interdisciplinario en terreno,  encargado de personas mayores y su cuidador.

Es importante al momento de abordar las demencias, considerar la figura del cuidador, ya que sabemos la mayoría, se encuentra sobre los 60 años, una de las aristas más importantes, es la sobrecarga del cuidador, no solo a nivel psicoemocional, sino también en su escasa satisfacción vital. El apoyo al cuidador no puede, ni debe limitarse a iniciativas de corte social, proveer ayuda al autocuidado, disminuir tiempos dedicados a las tareas de cuidador y/o impartir instrucciones de autocuidado. Si bien es evidente que ayuda, no es todo lo que podemos entregarle a los cuidadores, debemos globalizar nuestra tarea, en los centros de salud  y a la vez individualizar nuestro accionar como profesionales y equipos de trabajo,  de acuerdo a las necesidades e intereses de cada usuario y su cuidador.